La población del departamento Chilecito tuvo un crecimiento continuo en los últimos dos siglos: desde 7.967 habitantes en el año 1895 hasta alcanzar los 49.580 habitantes (10,2 hab/km2) según los resultados preliminares del último censo nacional (2010). En la actualidad, puede considerarse que su área de influencia directa es de 90 mil habitantes considerando los departamentos aledaños.
La variación intercensal del total de la población del departamento Chilecito (17%) ha sido superior al promedio provincial (14%).
La conformación del Sector Educativo de la Región II – Valle de Famatina – se estructura en base a organismos que dependen del Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología de la provincia de La Rioja, tomando como referencia zonas geográficas, y que incluyen una población estudiantil que abarca los correspondientes niveles de estudio.
El universo estudiantil a nivel regional, está constituído por más de 16.500 alumnos, distribuídos en establecimientos de las ciudades cabeceras de ambos departamentos y sus respectivos distritos. Este indicador está mostrando el potencial de recursos humanos en instrucción constante, con evolución de matrículas en los diferentes niveles para una futura inserción en la vida universitaria.
En el departamento de Chilecito en particular, la oferta de nivel superior no universitario se concentra exclusivamente en carreras de formación docente y fuertemente en establecimientos del sector estatal.
En ese sentido, la necesidad de la región de contar con profesionales y técnicos que aborden los problemas y den soluciones a las inquietudes regionales es casi exclusiva de la universidad estatal ya que, si se observa el porcentaje de participación por sector en los niveles primario y medio, corresponde la mayoría a instituciones estatales, en tanto se supone que la tasa de pasaje se mantiene por gestión, debido en parte a la escasa oferta privada de estudios universitarios.
Asimismo, las instituciones de nivel superior no universitario ubicadas en la ciudad de Chilecito no ofrecen carreras de orientación técnica, lo cual evidencia una demanda insatisfecha por estudios de nivel superior que permitan una rápida inserción laboral tanto como la posibilidad de articulación con carreras de grado universitario.