Hace 48 años, mediante resolución 2997/24, la Asamblea General de Naciones Unidas crea el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente, PNUMA o UNEP por sus siglas en inglés (United Nations Environment Program).
El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente – PNUMA, es la principal autoridad del ambiente a nivel global y tiene por objeto evaluar el estado ambiental mundial y las causas de los impactos ambientales. Desde su creación desarrolla un rol articulador entre el conocimiento científico y normativo, visibilizando la importancia de actuar coordinadamente con los Estados para beneficio de los ecosistemas y las sociedades. De esta manera colabora y asiste a los países y regiones para que estos puedan desarrollar políticas ambientales acordes a cada realidad específica como así también frente a problemáticas comunes.
Su sede central se encuentra ubicada en Nairobi (Kenia), demostrando el interés por integrar a los países periféricos en el esquema de protección ambiental global. De tal modo, sus equipos técnicos formulan programas y legislación tendiente a favorecer una conciencia ambiental responsable a lo largo y ancho del planeta, articulando con una serie de agencias de enlace y redes de colaboración.
El PNUMA clasifica su trabajo en siete áreas temáticas:
- Cambio Climático.
- Desastres y Conflictos.
- Manejo de Ecosistemas.
- Gobernanza Ambiental.
- Productos Químicos y Desechos.
- Eficiencia de Recursos.
- Medio Ambiente bajo revisión.
Los desafíos de la gobernanza ambiental internacional, encontraron en este programa internacional una amplia agenda de temas de trabajo que se configuran en convenciones, cumbres y acuerdos multilaterales que luego fueron receptados por gobiernos nacionales y subnacionales. Entre estos, se encuentran los Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS) que fueron adoptados en 2015 por la comunidad internacional con metas específicas que deberían alcanzarse para 2030 o antes, entre los que se incluyen: el tratamiento del cambio climático, la desigualdad económica, la innovación, el consumo sostenible y la paz, como la justicia.
Las alteraciones en el ambiente dan cuenta que resulta imperioso actuar en conjunto y establecer acuerdos desde una visión integradora de diversos aspectos: éticos, políticos, económicos, sociales, culturales, comprendiendo que el planeta es “la Casa Común” que nos alberga y cuya responsabilidad por cuidarla, exigen de un esfuerzo de todos los actores y sectores.
Los retos presentes para un abordaje serio de la protección ambiental son multidimensionales y concurrentes, por lo que se considera relevante conocer la labor de este programa internacional, su agenda y objetivos, los cuales encuentran en la educación ambiental de cada ser humano del mundo, la posibilidad de generar las condiciones para un planeta que preconice la sostenibilidad y sustentabilidad como principios rectores hacia el desarrollo de sociedades comprometidas con las futuras generaciones y ecosistemas.
Dra. Celia Romina Bruculo
Licenciada en Ciencia Política (UNLaR), Diplomada en Investigación en Humanidades y Ciencias Sociales (UBA), Magíster en Administración Pública (UNLaR), Doctora en Relaciones Internacionales (USAL-CONICET)
Investigadora del Instituto de Investigaciones sobre Sociedad, Conocimiento y Desarrollo (IISCD-UNdeC)
Invitada por el Instituto de Ambiente de Montaña y Regiones Áridas (IAMRA-UNdeC)
Comentarios recientes