El 4 de septiembre de 1949 se celebró por primera vez en Argentina el Día del Inmigrante. La fecha fue elegida en conmemoración a la disposición dictada por el Primer Triunvirato, en 1812, que tenía la intención de fomentar la inmigración y ofrecer protección a los individuos de todas las naciones y a sus familias que quisieran fijar su domicilio en el territorio nacional.
Lo que hoy es la República Argentina fue uno de los países que más inmigrantes recibió entre 1880 y 1930. Si bien la cantidad de inmigrantes (provenientes en su mayoría de Europa) fue menor a los que desembarcaron en Estados Unidos, Argentina tuvo la mayor proporción de extranjeros en relación con el total de su población. De acuerdo a los datos del censo de 1914, una tercera parte de los habitantes del país estaba compuesta por inmigrantes.
Entre los cientos de miles de personas que echaron raíces en estas tierras, existen muchas historias sobre barcos, colectivos, viajes, sabores, ilusiones y esfuerzos para construir nuevas patrias.
Por esto, saludamos a todos aquellos inmigrantes que arribaron a nuestra nación con el fin de forjar un futuro mejor para ellos y sus descendientes.
Fuente: Ministerio de Cultura de la Nación